Muy bravo salí, crucé el Pánuco 2 veces, abracé el Grijalba tenuemente
y crucé el Carrizal; pero el Peatón le escribe al camino viejo...
Comencé por senderos conocidos,
Con olor a hierba malva, malangos,
Y sonido de corrales, de relinchidos;
Me saludaron las palomas y los tordos…
Caminando a un lado de las presas
Del Jahuey y del arroyo seco,
Evité el picapica, los pinolillos y la espina.
A mi paso me vigilaban las chacas,
El orejón con olor a hierba allí estaba.
Me perdí en la postal de las cotorras
Y en la sombra de los helechos,
Saludé a los viejos cortando leña;
Con su tercio en la espalda, el recuerdo,
Respiré, recordé, caminé el camino viejo
Y llegué donde el amor ya no estaba…
EL PEATONDORO
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